Tal como había anunciado el presidente Juan Manuel Santos,
el comandante del Ejército confirmó la orden de retiro de efectivos castrenses
de la zona donde se prevé liberar al general Alzate el próximo sábado.
El comandante del Ejército colombiano dio la orden de retirar a los militares de la zona Foto:Universal.co |
El Gobierno de Juan Manuel Santos anunció este miércoles la
orden de interrumpir el despliegue militar que mantenían en la zona donde se
prevé inicien los protocolos de seguridad para la liberación del general Rubén
Alzate, ubicada en el departamento del Chocó (noroeste).
Vladimir Carrillo, corresponsal de teleSUR en Colombia,
informó que el comandante general de Ejército colombiano autorizó el retiro de
efectivos castrenses de la zona "para que se inicie el protocolo
humanitario que pretende traer a la libertad al general Alzate y dos
compañeros”.
Santos anuncio este miércoles que el general Alzate, comandante
de la Fuerza de Tarea Titán, será liberado este 29 de noviembre, junto al
suboficial José Rodríguez Contreras y la abogada Gloria Urrego. A través de su
cuenta en Twitter el mandatario colombiano confirmó la suspención de las
operaciones militares en la zona destinada para la liberación.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del
Pueblo (FARC-EP) cumplieron este martes con la liberación en el departamento de
Arauca (noreste) de los soldados, Jhonatan Andrés Díaz y Paulo César Rivera en
el marco de un Acuerdo Humanitario Especial liderado por el Comité
Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Ambos soldados estuvieron conversando con el ministro de
Defensa, Juan Carlos Pinzón, quien constató las buenas condiciones de salud en
las que se encuentran, pese a que permanecerán en el Hospital Militar de Bogotá
(capital) para realizarse evaluaciones psicológicas.
Chocó espera la paz
Carillo recordó que los habitantes del Chocó están apostando
porque se reanuden los diálogos de paz y se firmen los acuerdos entre el
Gobierno y las FARC-EP para terminar con el conflicto armado que los ha azotado
por más de medio siglo.
Chocó es característico por su selva húmeda, “por lo que las
condiciones topográficas dificultan el despliegue del operativo de liberación”,
acotó el periodista.
Sus habitantes esperan al mismo tiempo que la firma de la
paz traiga consigo el fin de la violencia, una situación que viven desde hace
más de 17 años a causa del conflicto armado, la desatención social, el saqueo
de mineras y la pobreza a la que los ha sometido el estado.
Este departamento es uno de los pobres de Colombia, siendo
rico en recursos naturales. Además carece de insumos vitales. “La falta de agua
potable, una de necesidades básicas afecta al 80 por ciento de los habitantes”,
destacó Carrillo.
La fama de las minas
de oro y platino del Chocó, después de la independencia de Colombia, desataron
una ola de aventureros europeos, especialmente británicos y franceses que
recorrieron las selvas en la búsqueda de yacimientos mineros. Explotaron a su
gente, afirma el articulista colombiano, José Mosquera.
El anuncio de la
liberación de Alzate, dio tranquilidad a las comunidades de esta región, “pues
los habitantes le apuestan a la continuidad del proceso de paz”, agregó
Carrillo.
¡No más desplazados!
Desde principios de año, 4 mil personas han tenido que huir
de la violencia provocada por grupos paramilitares que intentan controlar
territorios en la región, de acuerdo con datos de El Espectador.
Pese a su gama de riqueza natural, 48 por ciento de los los
habitantes del Chocó está en pobreza extrema por lo que la Organización de las
Naciones Unidas (ONU) ha insistido desde julio pasado cuando el Alto
comisionado Todd Howland visitó el país, en que el Estado debe atender la
situación de los derechos humanos relacionados con las necesidades básicas,
como la alimentación o la sanidad, señala El Espectador.
De modo que los Diálogos de Paz, iniciados en el 2012,
representa para ellos un desahogo a la violencia.
Por: teleSUR-Semana/och-JR