
El organismo de control calificó como desfavorable la
gestión adelantada por la Gobernación en este aspecto, por no cumplir los
principios de economía, eficiencia y eficacia.
El hallazgo más relevante detectado por la CGR tiene que ver
con el indebido pago, y sin los debidos soportes, por parte del ente
territorial de medicamentos y prestación de servicios a pacientes hemofílicos,
por valor de $25.450 millones, que correspondía asumir a las EPS donde los
mismos se encontraban afiliados (MUTUAL SER, COMFAMILIAR, COOSALUD, COMPARTA,
SALUDVIVA, LA NUEVA EPS y CAJACOPI).

Otro hallazgo importante, esta vez en el manejo de recursos
para educación, está relacionado con la contratación por $14.886 millones del
servicio educativo en el departamento con la Diócesis de Magangué (contrato No.
276-2013), donde se observó que se subcontrató el 95% del valor total del
contrato.
La Contraloría detectó 244 registros educativos duplicados
de alumnos matriculados en las diferentes instituciones educativas oficiales
comprendidas en el objeto de ese mismo contrato (276 de 2013). Adicionalmente,
se verificó la ausencia de 240 estudiantes que no se hallaron en tales
colegios. Igualmente, no se encontró registro de sus calificaciones, con lo
cual se evidencia que este servicio no se prestó.
Según el listado que aportó la Secretaría de Educación
Departamental sobre alumnos efectivamente atendidos por el contrato referido,
aparecen registros de 66 estudiantes que la CGR constató no fueron matriculados
y por tanto no se les prestó servicio educativo.
Los daños patrimoniales que presuntamente se dieron por
irregularidades en la ejecución del contrato suscrito con la Diócesis de
Magangué suman $3.710 millones.
Pagos indebidos por pacientes hemofílicos

Esto teniendo en cuenta que el medicamento requerido (Fandhi
500 U.I Factor VIII Antihemofilico), es suministrado por las EPS y también
forman parte del POS los diferentes procedimientos para el tratamiento integral
de esta enfermedad.
Adicionalmente, la Contraloría encontró que los pagos a cada
IPS por este concepto se realizaron sin que existiera certeza de la prestación
efectiva del servicio.
La facturación presentada por las IPS no presenta
detalladamente los costos de los procedimientos realizados para la atención de
cada paciente atendido y tampoco existe documento que indique el precio al cual
el prestador facturó los medicamentos e insumos a la Secretaría de Salud.
No se observó que la auditoría médica de la Secretaría de
Salud Departamental hubiera realizado glosas a la facturación radicada por
concepto de prestación de servicios de salud a pacientes hemofílicos, a pesar
de que estaba presentada de manera inadecuada y carecía de los debidos
soportes, lo cual imposibilitaba las verificaciones correspondientes sobre los
procedimientos efectuados, medicamentos suministrados y costos y tarifas
aplicadas para los cobros presentados por las IPS.
La Secretaría de Salud Departamental de Bolívar ejecutó
recursos de Prestación de Servicios de Oferta y NO POS, sin que hubiere mediado
contrato con las IPS que presuntamente atendieron a los pacientes
diagnosticados como hemofílicos.
Una de estas IPS es ASISTEGRAL. La Contraloría visitó las
instalaciones donde presuntamente funcionaba y encontró una locación desocupada
que no presta ningún tipo de actividad económica. Una persona, que se
identificó como la representante legal de la firma, indicó que ya dejaron de
funcionar. Al respecto, la Secretaría de Salud Distrital de Cartagena informó
en un oficio dirigido a la CGR que dicha IPS funcionó en el Distrito desde
febrero de 2012 hasta 2014.
Se determinó también visitar la Fundación Ciénaga de la
Virgen y se pudo establecer que la dirección que aparece en el certificado de
Cámara de Comercio y en la papelería propia de esta IP, era inexistente, por lo
cual no se pudo adelantar ninguna diligencia de parte del equipo auditor.
La IPS ASISTEGRAL recibió pagos por $10.467 millones, la IPS Fundación Ciénaga de la Virgen $9.513 millones y la ESE Hospital Divina Misericordia de Magangué $5.469 millones.