La minería ilegal se
ha convertido en una de las principales fuentes de financiamiento de las
guerrillas. El Gobierno estimó en unos 2.450 millones de dólares
estadounidenses las recaudaciones anuales de distintas agrupaciones que no
pagan impuestos.
actualidad.rt - Esta
es una de las razones por las que las autoridades colombianas están dispuestas
a aplicar medidas draconianas a quienes se dediquen a esta práctica. Se trata
de penas de hasta 20 años de cárcel por el delito de extraer ilegalmente el metal
precioso.
A finales de abril del
año 2014 un desprendimiento de tierra en la mina ilegal de oro situada en
Vereda San Antonio (municipio de Santander de Quilichao, en el departamento del
Cauca, oeste de Colombia) dejó 12 muertos. Las autoridades declararon su intención
de cerrar el negocio. Sin embargo, el reportero de RT Bricio Segovia ha
descubierto que casi un año y medio después de la tragedia se sigue trabajando
en la mina afectada.
Según le explicaron
ante una cámara oculta los buscadores de oro en San Antonio, el sistema de pago
en la cantera es bastante equitativo. El valor del metal lavado se reparte a
diario entre todas las personas que hayan estado trabajando "a partes iguales".
El método de
extracción tradicional de oro que practican en la zona está permitido por la
ley. El problema es que los grupos involucrados en esta minería 'popular' no
piden los permisos necesarios a las autoridades y acaban trabajando para grupos
delictivos. Además, los indígenas colombianos se han quejado en múltiples
ocasiones que esta actividad les causa molestias.