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Líderes, taitas, mayores, tegüalas y sabios participaron de las conclusiones finales. Foto: Juan Pablo Gutiérrez/ONIC |
¡La vida es sagrada,
la vida es armonía.
El Buen Vivir
es vida y armonía.
Para el Buen Vivir
y la Vida Plena,
la Paz
es ineludible!
Declaración de La María - Piendamó
Que los pueblos indígenas de Abya Yala, resistimos y seguiremos resistiendo con dignidad y paz con acciones colectivas de lucha frente a la exclusión histórica y sistemática contra la vulneración de nuestros derechos y nuestro paradigma como el Buen Vivir por parte de los Estados y la sociedad dominante.
Ante ello nos reafirmamos en la vigencia del derecho propio, los tratados internacionales como el Convenio 169 de la OIT, la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y las leyes nacionales, por ello rechazamos todas las formas de exclusión, discriminación de los Estados que tienen la obligación moral de implementar los derechos reconocidos.
Que el modelo económico neoliberal actualmente constituye el único paradigma por el que la mayoría de Gobiernos han venido apostando y otros no pueden escapar, son los que imponen políticas de despojo y saqueo de los bienes comunes en nuestros territorios (tierras, agua, bosques, biodiversidad, océano, aire y nuestros saberes) mediante mecanismos jurídicos como los Tratados de Libre Comercio (TLC) y los Tratados Bilaterales de Inversión (TBI), contratos jurídicos con las empresas multinacionales como la reciente amenaza contra la soberanía de los pueblos indígenas en la negociación del “acuerdo de la Alianza del Pacifico”.
Que el nuevo proyecto económico neoliberal a través de los gobiernos de turno han
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comunicaciones abyayala.org |
radicalizado su política económica extractivista en alianza con las empresas multinacionales respaldados por las oligarquías nacionales, dando continuidad al modelo capitalista; además se militariza los territorios, se criminaliza la protesta y se penalizan las movilizaciones de los pueblos indígenas y sectores sociales con acciones de represión, persecución, judicialización a las autoridades y líderes indígenas y sociales, como una política del estado con la única finalidad de garantizar el saqueo y la depredación .