La implementación de las redes 5G traería mayor cobertura para el país.Foto: archivo Unimedios. |
La subasta de espectro se realizó el 20 de diciembre.Foto: MinTic. |
agenciadenoticias.unal.- En Colombia las redes 5G están en proceso de despliegue, después de que la Agencia Nacional del Espectro (ANE) adjudicara el pasado 20 de diciembre la subasta de espectro radioeléctrico para la implementación de redes 5G. En la subasta participaron 4 operadores móviles que ya funcionaban en el territorio nacional: la unión temporal Tigo-Movistar, Claro, Wom y Telecall, uno nuevo que llega al país. En total se adjudicaron 4 bloques de 80 megahercios (Mhz) en la banda de 3.500 por un valor de 1,37 billones de pesos.
El debate sobre las implicaciones en la salud se da entorno a la exposición con el campo electromagnético.Foto: Jeimi Villamizar, Unimedios. |
¿Cómo se relaciona con la salud humana?
A raíz del debate público sobre el impacto de las 5G en la salud, un equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) emprendió el estudio solicitado por la ANE.
Para ello, combinaron simulaciones electromagnéticas y térmicas detalladas, con estudios experimentales, utilizando un modelo anatómico de un maniquí relleno con un gel que imitó las propiedades electromagnéticas de los tejidos humanos y así se podía evaluar el impacto de los campos electromagnéticos en el cuerpo humano.
Con este propósito se empleó una herramienta comercial con licencia académica gratuita que permitió representar más de 200 tipos de estructuras y tejidos del cuerpo humano. Después los esfuerzos se enfocaron en crear modelos detallados tanto de terminales móviles y estaciones base 5G como de diversas partes del cuerpo humano, considerando diferentes escenarios de exposición.
Pero eso no fue todo. También se realizaron simulaciones numéricas para entender cómo los campos electromagnéticos interactuaban con el cuerpo humano, lo cual incluyó la evaluación de la absorción de energía en diferentes tejidos y órganos.
El profesor Javier Leonardo Araque Quijano, de la Facultadde Ingeniería de la UNAL.Foto: Javier Leonardo Araque Quijano. |
“Las simulaciones se basaron en las ecuaciones de Maxwell y de Pennes, que rigen el comportamiento de los campos electromagnéticos y el calor en los sistemas biológicos. Estos modelos permitieron analizar cómo los campos afectan diferentes partes del cuerpo humano, considerando diversos escenarios de exposición, como hablar por teléfono, hacer videollamadas o llevar el dispositivo en el bolsillo”, indica el profesor Javier Leonardo Araque Quijano, de la Facultad de Ingeniería de la UNAL, líder del equipo investigador.
Los teléfonos móviles son transmisores de radiofrecuencias de baja potencia, lo que significa que tienen una potencia de salida relativamente baja y trabajan con frecuencias que van de los 450 a los 2.700 megahercios. Esta seguridad se debe, en parte, a la baja potencia de los teléfonos móviles.
Dichos campos electromagnéticos, de baja potencia y frecuencia, son considerados como seguros por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, el profesor explica que la absorción de energía por parte del cuerpo se da de manera muy complicada debido a las propiedades variadas de los tejidos involucrados y su interacción (piel, grasa, músculo, huesos, vasos sanguíneos, etc.).
Las redes 5G prometen beneficios como una mayorvelocidad y capacidad.Foto: Jeimi Villamizar, Unimedios. |
Al respecto, el profesor Araque manifiesta que “los sistemas 5G son más seguros para la exposición a campos electromagnéticos, y esta investigación proporciona un respaldo cuantitativo a estas afirmaciones”.
Así mismo, indicó que la reducción en los niveles de potencia de estas redes contribuye a una exposición menos nociva para la salud.