Estos defensores y defensoras de derechos humanos lideraron el diálogo por parte de los pueblos afrocolombianos en el Norte del Cauca que culminó la noche del 27 de abril con un acuerdo con el Gobierno, con el acompañamiento y facilitación de esta Oficina.
La
Oficina urge, en estos momentos, al Estado a darles a estos
defensores protección inmediata y adecuada, e investigar,
identificar, juzgar y sancionar a los autores de las acciones en su
contra.
En los últimos dos años, la Oficina ha hecho público dos comunicados en los que rechazó las amenazas y ataques en contra de estas mismas personas, realizadas también luego de movilizaciones sociales y negociaciones con las autoridades.
La defensa de los derechos humanos y la exigencia de su plena vigencia no sólo es una labor legítima y garantizada por la ley, sino que es esencial para la construcción de una paz duradera.
En los últimos dos años, la Oficina ha hecho público dos comunicados en los que rechazó las amenazas y ataques en contra de estas mismas personas, realizadas también luego de movilizaciones sociales y negociaciones con las autoridades.
La defensa de los derechos humanos y la exigencia de su plena vigencia no sólo es una labor legítima y garantizada por la ley, sino que es esencial para la construcción de una paz duradera.