colombiainforma.info - Posterior a que la jueza legalizará las detenciones, consideradas irregulares por la defensa, inició el proceso de imputación de cargos contra trece personas sindicadas por el gobierno de pertenecer a las milicias urbanas del Ejército de Liberación Nacional -ELN- y de ser los responsables de las bombas que estallaron el pasado 2 de julio en las sedes de Porvenir en la ciudad de Bogotá.
A la fecha, la
Fiscalía presentó como material probatorio interceptaciones telefónicas,
fotografías y seguimientos que venían de varios meses atrás. Asimismo, libros
de pensamiento crítico, banderas del Congreso de los Pueblos y en el caso de
los estudiantes, banderas de la Red Revuelta e Identidad Estudiantil,
computadores portátiles, USB, agendas, celulares, etc. Según el ente acusador,
estas pruebas los vinculan a los disturbios del pasado 20 de mayo en la
Universidad Nacional, y otras explosiones el año anterior. Ningún material probatorio apunta a las bombas de
Porvenir por lo tanto, desde que inició la audiencia de imputación, las
condiciones han cambiado y de las 13 detenciones
que se mantienen (recordemos que dos se hicieron sin orden de captura) tan solo tres continúan siendo sindicados de pertenecer
al ELN.